“No traíamos mucha experiencia -nos confesaba ella- y cogemos la moto esporádicamente. Yo tenía mucha desconfianza en mí misma con la moto y pensé en hacer un curso a ver qué tal. Me voy súper contenta, con ganas de hacer el resto de los cursos más adelante. Hoy he cogido mucha soltura y seguridad al manillar. Me ha servido mucho, por ejemplo, el ejercicio del slalom, y también el de la frenada porque es muy importante saber cómo reaccionar si te sucede algo de repente, una moto no es lo mismo que un coche…”, añade Carla.
“Este curso me ha ayudado primero a tocar muy bien el freno trasero -nos explica Kevin-, porque hasta ahora nunca lo utilizaba. Mi experiencia en moto era cero. Hace tan solo 6 meses que tengo la CB650R. Iba muy por libre, pero sin saber muy bien lo que hacía. Ahora me voy del HIS con mucha más confianza. ¡Y seguro que vamos a repetir!”.
